LÉEME EN TU IDIOMA

25 abril 2022

IMPRONTAS (Microrrelato)

 



IMPRONTAS

Parecía que el padre jamás saliera del sótano. Allí tenía montado su taller, muy ordenado todo, cada herramienta en su lugar, algunas en la pared, colgadas de alcayatas: alicates, martillo, sierra, hacha; otras bien dispuestas sobre la mesa de trabajo: destornilladores, limas, cúter; todo nuevo y colocadito en la misma posición. Nadie comprende cómo generaba tanto ruido.

La madre estaba siempre trajinando en la cocina. Hija de carnicero, manejaba los cuchillos de la tacoma con maestría y dedicación inusitadas. Decapitaba pollos y destripaba conejos para trincharlos y cocinarlos en sabrosas salsas. Los aromas asombraban por ser tan espesos y duraderos.

El hijo, como aún no tenía edad de escuela, pasaba los días buscando diversión por la casa. En las noches jugaba a ser mayor practicando aparecer y desaparecer en la oscuridad del dormitorio rosa. Era cuando Teresita castañeteaba los dientes bajo estas sábanas de corazoncitos estampados que nunca la protegieron.